EL ESPEJO DE LA VIDA

MURIÓ LA PERSONA QUE IMPEDÍA TU CRECIMIENTO,
Un día, cuando los empleados llegaron a trabajar, encontraron en la recepción un enorme letrero en el que estaba escrito:
"Ayer falleció la persona que impedía el crecimiento de Usted en esta empresa. Está invitado al velorio, en el área de deportes".

Al comienzo, todos se entristecieron por la muerte de uno de sus compañeros, pero después comenzaron a sentir curiosidad por saber quién era el que estaba

Impidiendo el crecimiento de sus compañeros y la empresa.

 ¡ La agitación en el área deportiva era tan grande que fue necesario llamar a los de seguridad para organizar la fila en el velorio.

 Conforme las personas iban acercándose al ataúd, la excitación aumentaba:

¿Quién será que estaba impidiendo mi progreso? ¡Qué bueno que el infeliz murió!!

Uno a uno, los empleados agitados se aproximaban al ataúd, miraban al difunto y tragaban seco. Se quedaban unos minutos en el más absoluto silencio,
como si les hubieran tocado lo más profundo del alma.

Pues bien, en el fondo del ataúd había un espejo, ...cada uno se veía a si mismo.... con el siguiente letrero:

"Sólo existe una persona capaz de limitar tu crecimiento: ¡TU MISMO"!

Tú eres la única persona que puede hacer una revolución en tu vida.

Tu eres la única persona que puede perjudicar tu vida, y tu eres la única persona que se puede ayudar a si mismo.

TU VIDA NO CAMBIA CUANDO CAMBIA TU JEFE, CUANDO TUS AMIGOS CAMBIAN, CUANDO TUS PADRES CAMBIAN, CUANDO TU PAREJA CAMBIA.

TU VIDA CAMBIA, CUANDO TU CAMBIAS,

ERES EL ÚNICO RESPONSABLE POR ELLA.

"EXAMÍNATE.. Y NO TE DEJES VENCER"

"El mundo es como un espejo, que devuelve a cada persona, el reflejo de sus propios pensamientos. La manera como tu encaras la vida es lo que hace la diferencia".

EL ZAPATERO

Dios entró en la tienda le dijo: soy tan pobre que no tengo ni siquiera otras sandalias; y como ves están rotas e inservibles. ¿Podrías tú reparármelas por favor?, no tengo dinero aquí, pero te puedo dar lo que quieras si me las arreglas.

El zapatero con mucha desconfianza dijo: ¿Me puedes dar tu el millón de
dólares que necesito para ser feliz?

Dios le dijo: Te puedo dar 100 millones de dólares. Pero a cambio me debes
dar tus piernas...

El zapatero dijo: ¿Y de que me sirven los 100 millones si no tengo piernas?

Señor volvió a decir: Te puedo dar 500 millones de dólares, si me das tus
brazos.

El zapatero respondió: ¿y que puedo yo hacer con 500 millones si no podría
ni siquiera comer yo solo?

El Señor habló de nuevo y dijo: Te puedo dar 1000 millones si me das tus
ojos.
El zapatero solo dijo: ¿Y dime; que puedo hacer yo con tanto dinero si no
podría ver el mundo, ni poder ver a mis hijos y a mi esposa para compartir
con ellos?

Dios sonrió y le dijo: Ay hijo mío, como dices que eres pobre ¿; si te he
ofrecido ya 1600 millones de dólares y no los has cambiado por las partes
sanas de tu cuerpo! Eres tan rico y no te has dado cuenta

Sólo pensemos hoy en todo lo que podemos agradecer a Dios, y démosle gracias
pues es El quien nos ha dado la salud. No pidamos tanto dinero, pues es mejor tener todo nuestro cuerpo sano a tener todo el dinero del mundo.

COMO EXPLICAR A UN NIÑO TEMAS DIFICILES

Muchos padres no encuentran las palabras necesarias para explicar a sus hijos asuntos tan complejos como la muerte, el dolor, la violación, la prostitución. Aprende cómo explicarlos.
Muchos padres no encuentran las palabras necesarias para explicar a sus hijos asuntos tan complejos como la muerte, el dolor, la violación, la prostitución, el homosexualismo.
Aquí les entregamos un resumen de explicaciones apropiadas para un niño de siete años, que a la vez nos sirven para reafirmar nuestras propias creencias.

ENFERMEDAD, DOLOR Y MUERTE

“¿Por qué murió la mamá de mi amigo?"
Cuando un ser querido sufre por los dolores de una enfermedad o cuando muere alguien a quien se ama mucho, el hombre se pregunta: ¿por qué existe el padecimiento?, ¿por qué no vivimos en un mundo donde nadie sufra? Muchas veces, incluso, la realidad del dolor y la muerte nos sorprende porque vivimos en una época donde la medicina ha progresado mucho y las guerras -por lo menos en esta parte del planeta- no azotan a las familias como antes. Pero no debemos jamás olvidar esta verdad: todos moriremos y debemos confiar en que la muerte llegará en el mejor momento para cada cuál, aunque nos cueste aceptarlo.
El padecimiento personal -por dolor o enfermedad- debe ser entendido como una oportunidad de cambio, como un golpe duro que permite darse cuenta de muchas cosas, de valorar a las personas y a los bienes materiales con otra medida. El dolor permite transformarse. Por eso, las personas que logran sanar después de una enfermedad larga y dolorosa dicen que gracias a ella aprendieron a mirar el mundo con otros ojos: menos materialistas, mucho más humanos.
Por otra parte, si el mundo fuera perfecto y no existiera el sufrimiento, los seres humanos no tendrían nada que superar. Su vida se reduciría a la inutilidad absoluta. El hecho de tener que salir a trabajar para ganar dinero y comprar comida es una forma de evitar un dolor: el hambre. La muerte, en este contexto, es un plazo que nos fuerza a aprovechar la vida para sacar de ella lo mejor.
Del dolor muchas veces nace el amor. El parto, el dar vida a otro ser, sólo puede ser posible a través de él. Así, a lo largo de la historia, el amor siempre ha vencido al odio que provoca sufrimientos.
Cuando hay más dolor en el mundo, los seres humanos tienden a sacar de sí un enorme potencial de amor. Por eso, no debe extrañarnos que ese niño o niña que ha perdido a su padre o a su madre, saque de sí una madurez muy grande y un potencial de afecto insospechado.
Cuando alguien muere, sus familiares y amigos sufren por la separación. Se rebelan contra la muerte. Sin embargo, hay que pensar que la muerte es la separación del cuerpo y del alma. El cuerpo, por ser material, se desgasta, se corrompe como todo lo compuesto de materia. El alma, que no es material, jamás muere, sigue existiendo y por eso, cuando llega el momento de que el cuerpo vuelva a la tierra, el alma vuelve junto al Creador. Comienza una nueva etapa, una vida sin fin.

EL FRACASO
"Mi papá ha perdido su trabajo…”

En primer lugar hay que recordar que los hombres somos seres humanos y no dioses. Por eso, las cosas no siempre nos resultan como quisiéramos. Podemos fallar, pero tenemos que tener claro que cuando se fracasa no se pierde absolutamente nada de nuestro ser: seguimos siendo hombres capaces de emprender. Muchas veces, cuando todo resulta bien, se empieza a confiar excesivamente en las propias capacidades. Si las notas del colegio son muy buenas, se cree que es gracias a la inteligencia y no al esfuerzo. Entonces una mala nota puede venir "de perilla" para volver a tomar el correcto camino y dejar de autovalorarse.
- El fracaso tiene dos aspectos que vale la pena considerar:
· Puede dar nuevas fuerzas para empezar otra vez una tarea que no resultó.
· No se sabe si el fracaso traerá sólo consecuencias negativas. Puede traer ocultas muchas cosas positivas que en el momento mismo no se perciben, porque se está cegado por la pena o la rabia de haber fallado.
También hay que entender que si no se fracasara jamás, no se necesitaría tampoco la ayuda de los demás. Serían todos los seres humanos autosuficientes y quizás, serían innecesarias las familias. Al no conocer el fracaso, sería difícil comprender y ayudar al que fracasa. Por esta razón, en la adolescencia se es muy duro para juzgar: no se perdona con facilidad el error ajeno. Esto es porque se ha fracasado poco. Cuando se es mayor, se comienza a ser más indulgente, a perdonar con más soltura porque ya se ha probado en carne propia el error.
Hay un solo fracaso: cuando el hombre no quiere seguir luchando, cuando la persona se cansa de perseguir ideales, cuando renuncia a la capacidad de combate que es propia del ser humano. Cualquier otro fracaso es simplemente una piedra en el camino, que puede servir para vencer obstáculos más grandes del futuro.

LA POBREZA Y LA RIQUEZA

“¿Por qué hay niños que no tienen qué comer y otros, que botan la comida?"

Los bienes de la tierra como todo lo que está al alcance del hombre, pueden ser bien o mal usados. El hombre necesita de las cosas materiales porque en sí mismas son un bien que le permite vivir.
El hombre tiene derecho a un mínimo bienestar para él y su familia y, lamentablemente, existen muchas personas que no lo tienen. ¿Por qué? Porque el hombre puede caer en un uso egoísta de los bienes, dejarse invadir por un deseo de tener y tener más, descuidando el bienestar ajeno. Así surgen las desigualdades sociales que son un gran mal para la convivencia de los hombres, porque generan resentimientos, guerras y dolor.
La frase "pobres han existido siempre" no vale como justificativo para cruzarse de brazos, aunque también es ilusorio pretender una igualdad absoluta: hay personas que como fruto de su esfuerzo lograrán más que quien se "duerme en los laureles". Es indispensable que los adolescentes lo sepan para que en su natural afán de corregir el mal no caigan en la condena rápida de los que tienen más. Si bien hay personas que se han enriquecido de mala manera, hay muchas más personas que han creado y siguen creando fuentes de trabajo para los demás pagando sueldos justos y preocupándose del bienestar de quienes trabajan bajo su jerarquía.
El hijo está en edad de entender la pobreza como una responsabilidad personal y no sólo como responsabilidad de un tipo de gobierno o de las instituciones de beneficencia. Al niño hay que educarlo desde pequeño para que no se amarre a las cosas materiales, para que no mire con envidia, codicia o desprecio al del lado.
Si desde pequeño aprende a amar la sobriedad y el desprendimiento, entenderá en el futuro que su trabajo es la mejor forma de contribuir al mejoramiento material de la vida de sus semejantes.
El afán de riqueza daña desde dos ángulos: hace esclavo de lo material y por lo tanto, quita libertad; en segundo lugar, priva de la alegría de compartir. El dinero debe ser usado con mucho respeto, jamás derrochado y siempre bien empleado porque representa el trabajo del hombre.
EL DRAMA DE LA PROSTITUCIÓN

"Esa mujer que se acerca a los autos, ¿quién es?"

Durante toda la historia de la humanidad han existido personas que comercian con cosas "nobles", entendiendo por éstas, cosas que no tienen precio, como el amor, la libertad, la paternidad. Tal es el caso de la prostitución: el comercio del cuerpo humano como instrumento de placer.
Lo negativo de la prostitución es doble: por una parte, rompe el vínculo del sexo con el espíritu, del sexo con el amor, con lo cual se rebaja la sexualidad a un plano puramente instintivo, equiparando al hombre con los animales. Por otro lado, convierte a la persona en un objeto de placer y la priva de su dignidad.
La prostitución, por esas razones atenta contra la naturaleza del hombre y de la mujer: ambos rebajan el amor, ambos niegan su capacidad de expresar amor a través del cuerpo. Pero además, la prostitución es un drama social: un mal de la sociedad frente al que no podemos limitarnos a condenar frívolamente.
Es triste que algunas personas se ganen la vida vendiendo su cuerpo y más triste es que existan hombres que compren una versión rebajada y deteriorada del sexo. Aunque a veces algunos cuenten sus "hazañas" para despertar admiración entre quienes los escuchan, en el fondo, ellos van un paso más atrás que los que reservan su cuerpo para el amor, porque ya han privado al sexo de una de sus principales características: el ser un medio de expresar algo tan profundo como el sentimiento.
No es más hombre el que más usa el cuerpo, porque cuerpo tienen todas las bestias del reino animal.
Es más hombre el que usa la voluntad, que es característica exclusiva de la raza humana.

EL ABUSO DE LA VIOLACIÓN
Lo leí en el diario, ¿qué significa?"
 Violar significa abrir sin permiso algo de otra persona y sacar, robar lo que había allí guardado. Algo reservado. Por eso, cuando se dice que un hombre ha violado a una mujer es porque ese hombre ha pasado por encima de los deseos de ella, tomando su cuerpo para satisfacer sus propios y egoístas impulsos.
Una persona que tiene orden afectivo, orden en su forma de expresar amor, es incapaz de cometer algo semejante, porque asocia el sexo con el amor. Pero si la persona crece en un ambiente donde ve el sexo como una forma de satisfacer los impulsos del cuerpo, se puede llegar a ser un esclavo de las sensaciones.
El hombre y la mujer fueron creados con la capacidad de amar, de unirse físicamente para expresar algo muy profundo que emana del espíritu. El hombre que viola a una persona, fuerza su cuerpo y pisotea su espíritu. El daño que le provoca es físico y emocional: le priva de su deseo de reservarse y ser exclusivamente del hombre amado.
Al violador hay que mirarlo como a alguien débil, incapaz de sentir la felicidad de la entrega amorosa. Está cercano al animal, que busca sólo la satisfacción física y es cobarde porque se aprovecha de su fuerza.

HOMOSEXUALIDAD Y LESBIANISMO

"Hoy, se acercó un hombre y quería sacarnos una foto y…..
Se llama homosexual al hombre que en vez de unirse a una mujer para formar una pareja, se une a otro hombre. Se llama lesbiana a la mujer que en vez de unirse a un hombre para amarse y tener hijos, se une con otra mujer. Así como la prostitución es el comercio del cuerpo y la masturbación es el amor volcado sobre sí mismo, la homosexualidad y el lesbianismo son desviaciones antinaturales del objeto del amor. Tan antinaturales son que van contra el orden impreso en el cuerpo, contra las formas anatómicas del hombre y de la mujer. El hombre fue creado para unirse a la mujer y los complejos sistemas reproductivo, digestivo, circulatorio… del cuerpo humano, están ordenados a ese fin.
La unión de dos seres del mismo sexo no es natural desde este concreto punto de vista.
La homosexualidad y el lesbianismo son una realidad que se da en el mundo por un sinfin de razones: tristes algunas, repudiables otras.
Hoy, los homosexuales y las lesbianas quieren tener acceso al "matrimonio" y piden que sus uniones sean reconocidas por la sociedad. Pero, ¿puede tener derecho algo que va contra la naturaleza humana?
No se puede juzgar frívolamente a quien padece este tipo de desviación. Hay que tener presente que siempre hay una causa que da lugar a ella.

AUTONOMIA, QUIERO MI LIBERTAD. (hijos y educacion)

Según crece, un niño pide y logra autonomía. Para saber cuando ir soltando la mano, es necesario probar sus grados de responsabilidad.
Si hasta hace poco nuestro hijo o hija se divertía inocentemente con el balde de arena en el jardín de la casa, a la vista de la mamá y los hermanos, es precisamente a esta edad, alrededor de los siete años, cuando él o ella comienzan a pedirnos continuamente “permisos” que los alejan de nuestro cuidado visual.
Quizá sea durante este verano, por ejemplo, que pida algunas nuevas libertades: irse con amigos de excursión, quedarse hasta más tarde en la playa con ellos, andar en bicicleta con los otros niños por el barrio…
¿Debemos dejarle? Todo depende de la madurez de nuestro hijo, por supuesto, pero un niño o una niña entre los siete y los diez años está en un período apropiado para ir adquiriendo más autonomía, a la vez que más responsabilidad y madurez. Dentro de poco será adolescente y sería muy bueno que para entonces hubiese aprendido a responder por sus actos.

¿LO DEJO O NO?

La teoría quizás sea muy fácil: el hijo o la hija han de tener la oportunidad de emprender más iniciativas por sí mismos. Pero, ¿cómo la llevamos a la práctica? Poco a poco. Es decir, un día pretenderá irse en bicicleta solo con los amigos por el campo. Le diremos que no se meta por el barro. Si cuando vuelve está relativamente limpio y la bicicleta también, nuestro hijo está preparado para dar otro paso más en la adquisición de libertades.
Casi podemos decir que se trata de un círculo vicioso (en este caso virtuoso). Hemos de conceder a nuestro hijo la debida autonomía, siempre y cuando sepamos que podemos confiar en él. Esto, a su vez, le hará ser más responsable y madurar, pues se dará cuenta de que nosotros confiamos en él y no querrá defraudarnos. Y, por eso, estará preparado para recibir un nuevo grado de autonomía.

CONFIAMOS EN ÉL
Es necesario insistir en la idea clave de la confianza. Sabemos que podemos confiar en nuestro hijo y por eso lo dejamos irse de paseo, o a la piscina con el hermano mayor de uno de sus amigos. Y el hijo, que se da cuenta de que sus padres confían en él, será más responsable y merecerá que le demos más libertades en ocasiones posteriores.
De este modo, cuando lo que nos pida sea una locura, o dudemos de si está maduro para ello, le negaremos el permiso. Pero siempre hay que hacerlo razonando los por qués. No es bueno para él que le demostremos desconfianza.
Hay que dejarle claro que nos negamos por razones objetivas, externas al niño o niña: "No puedes ir a nadar al río porque hay corriente".

APRENDER DE LOS ERRORES

A veces, habrá que hacerse el distraído, exponerse a ser engañado en cosas de poca importancia (con una ingenuidad sólo aparente), antes que mantener ante los hijos una actitud de desconfianza o de recriminación constante.
Hay que crear un ambiente de libertad en el que nuestro hijo se sienta a sus anchas, aunque también perciba que el control existe. Así, el buen ejemplo rendirá sus frutos. Habrá que desechar las sospechas injustas, y la confianza ayudará a que se duela sinceramente cuando defraude a sus padres.
Por eso, a veces no importa dejar que nuestro hijo se equivoque, porque de los errores también se aprende y quizá más. Si no existen peligros serios, es bueno que afronte por sí mismo las contrariedades.

PODEMOS ESTAR TRANQUILOS
Nuestro hijo en esta etapa no es tan chico, pero tampoco tan grande. Hay una serie de condiciones que deben cumplirse antes de que les demos libertades, especialmente en verano:
- Hemos de extrañarnos cuando nos pida algo que suponga no venir a almorzar, o llegar más tarde a comer. Hay que respetar los horarios familiares y si no se levanta temprano ni cumple con su encargo en la casa, quizás no se merezca que le demos esa autonomía.
- Confiamos en el niño, pero estaremos más tranquilos si cuenta con naturalidad en la casa lo que hace con los amigos en su tiempo libre, sin omitir ni mentir. En caso contrario, si esconde algo, probablemente no sea nada bueno.
- Que nuestro hijo vaya en grupo con sus amigos nos da más seguridad, sobre todo si los conocemos a todos y podemos confiar también en ellos. Además, es bueno estimular a nuestro hijo y a sus amigos para que se junten con sus hermanos o primos mayores.

CUIDADO CON LOS EXTRAÑOS
Un niño o niña de siete a diez años ya puede comprender que debe cuidarse de los extraños y que hay personas malas por el mundo. Debe saber que no tiene que hacerles caso ni permitir que se le acerquen a hablar. Así nos ahorraremos sustos y preocupaciones. Del mismo modo, también podemos explicarle las normas de seguridad vial, porque no estaremos con él en todo momento para cruzar la calle.
Una condición básica es conocer siempre donde está el hijo, aunque no lo veamos. Puede desaparecer después de tomar desayuno hasta la hora de almorzar, pero sólo si sabemos que está en casa de su amigo.
Del mismo modo, es mejor que se diviertan en espacios seguros o cerrados como un condominio, el camping donde estamos, una asociación juvenil o club deportivo. El entorno conocido y con acceso controlado da seguridad.

METAS POSIBLES

- Reflexionar si le estamos dando alguna responsabilidad al niño o niña en la casa (regar el jardín, cerrar las persianas, llevar la ropa sucia al lavadero). En caso contrario, puede ser ya hora de que ayude para que sepa lo que es responder por algo.
- Cuando pida permiso, demostrar siempre que confiamos en él, aunque haya que denegárselo porque se trata de algo peligroso.
- Si lo que nos pide es una locura, procurar justificar el “no” con razones objetivas.
- Para que aprenda a valerse por sí solo, podemos dejarle ir de paseo o de gira deportiva con personas de confianza y sin separarse del grupo.
- A veces, podemos recortar la libertad de nuestro hijo por miedo a que se equivoque. Pero de los errores también se aprende, y quizás más.
- Para darle a nuestro hijo la oportunidad de demostrar que confiamos en él, podemos hablar con las mamás de sus amigos para que vayan cada vez a una casa distinta a jugar. Así, sin sus padres cerca, tiene más libertad, pero sigue vigilado. La madre "anfitriona" tendrá que aceptar por esa tarde un trabajo extra.

70 MENTIRAS UNIVERSALES

El que esté libre de culpa, que tire la primera piedra.

1. Este año sí me pongo a estudiar.

2. La última y nos vamos.

3. Justo estaba por llamarte.

4. Jamás me vuelvo a emborrachar.

5. ¿¿YO?…Con esa??…NUNCA!!

6. El profe me tiene mala voluntad

7. ¿¿Yo te debo??…ni me acordaba.

8. Es culpa del árbitro.

9. Ando con ella sólo para pasar el rato…

10. Mañana te pago.

11. Te juro que te lo mandé.

12. No, no;…yo te llamo.
 
13. Ayer estaba enfermo.

14. Se me perdió tu teléfono.

15. Veo si tengo correo y me desconecto.

16. Sí, el carro es mío.

17. Justo estaba pensando en ti.

18. Sólo somos amigos.

19. Se cayó solo y se rompió.

20. ¡¡¡Pero si yo estudié esta vez!!!

21. ¡Me gustaste desde la primera vez que te vi!

22. ¡Sí, sí! ya voy…

23. Tuve un problema familiar, entiéndame, profesor.

24. Te llamo en 5 minutos, ¿sí?

25. Vente más tarde porque ahora voy a salir

26. Si, ya le dije.

27. Mil gracias, pero tengo una migraña terrible…

28. Todavía no he cobrado.

29. ¡Te queda súper bien!

30. ¡Claro que el cheque tiene fondos!

31. Te juro que no se lo voy a contar a nadie.

32. El lunes empiezo la dieta.

33. ¿Cómo que no pasó el depósito? ¡Si ayer en la tarde hice la transferencia por Internet!

34. Préstamelo y mañana te lo devuelvo.

35. Me iba a comprar uno de este año, pero este del \\’89 me gustó más.

36. Tienes los ojos más bonitos que vi en mi vida.

37. ¿Yo?..Ir a esos lugares?… ¡nunca!

38. Sí, choqué, pero la culpa la tuvo el otro.

39. Borracho lo que se dice borracho nunca estuve… sólo un poco alegre.

40. Sólo me tomé tres copas

41. No, no tengo teléfono… pero dame el tuyo que yo te llamo.

42. Te estuve llamando, pero sonaba ocupado.

43. Qué pena que no fuiste, en toda la reunión nos la pasamos hablando de ti.

44. En cinco minutos estoy con ustedes

45. Te juro que nunca lo pensé.

46. Señoras y señores: Seré breve…

47. Por favor….yo soy una persona decente.

48. Lo que sea tu voluntad.

49. Jamás te olvidaré.

50. Llámame en cinco minutos que estoy en una reunión.

51. Vengo tarde porque estuve en la biblioteca.

52. De aquí hasta la eternidad.

53. ¡¡¡No nos ganan!!!

54. ¡Oh…! No me di cuenta.

55. Yo tengo un tío en la policía.

56. Me quedé a dormir en la casa de un amigo(a)

57. La cuarta ronda ¡¡¡la pago yo!!!

58. Mañana te traigo tus CD\\’s…

59. Me voy… ¡que tengo clase!

60. Te debo tu regalo.

61. Dame tiempo…

62. Se me perdió tu correo, a ver, dámelo.

63. Yo, ¿cumbia y salsa?… ¡¡¡¡¡POR FAVOOOOOR !!!!

64. Ve con calma, yo te cuido a tu chica.

65. Yo a ella la veo como amiga.

66. Yo y mi ex ahora somos amiguísimos.

67. Cuando me case nunca más voy a mirar a otra.

68. ¿A esa? Ni borracho.

69. Estoy confundido (eso tiene nombre y apellido)

70. No eres tú, soy yo